Pide un deseo

lunes, 25 de junio de 2012

Michael Jackson - Billie Jean

Hoy hace exactamente tres años que nos dejó Michael Jackson, he aquí mi pequeño homenaje para el Rey del Pop.

jueves, 7 de junio de 2012

Leyendas de la danza árabe

Samia Gamal (سامية جمال) (Zaynab Ibrahim Mahfuz), (1924-1994) fue una bailarina egipcia de la danza del vientre. Inició su carrera en El Cairo, con el nombre artístico de Samia Gamal, en la compañía de Badia Masabni, fundadora de la moderna danza oriental. Destacó muy pronto como bailarina solista y, en 1942, comenzó una exitosa carrera cinematográfica. En 1949, fue nombrada La Bailarina Nacional de Egipto por el rey Faruk. En 1950, sus actuaciones en Nueva York en el cabaret The Latin Quarter fueron el inicio de su reconocimiento internacional como artista. Se retiró de los escenarios a principios de los años 80 y murió en el Cairo en 1994, a la edad de 70 años. Es la más famosa de las bailarinas de la segunda mitad del siglo XX. Participó en muchas películas y obtuvo un éxito sin precedentes. Su fama trascendió los límites del mundo árabe, y ella representó a Egipto en muchos festivales turísticos y celebraciones diversas. Supo renovar y aportar elementos nuevos a la danza oriental con gran sensibilidad y exquisito gusto. Viajó numerosas veces a diferentes países europeos donde participó en festivales, y fundó una escuela de danza oriental en Nueva York. Nagwa también fue cantante y artista de teatro y cine, y en el año 1992 se retiró definitivamente de la danza para consagrarse al cine. Se la consideró "embajadora de la danza árabe" entre los años 1960 y 1975 Nació en Alejandría en enero de 1939, bajo el nombre de Awatif Mohamed Agami. Nagwa bailaba en bodas, eventos familiares y encuentros sociales, donde se dio cuenta de su habilidad y amor por la danza egipcia, y pensó seriamente en convertirse en una bailarina profesional. En 1958, cuando tenía 15 años, Nagwa dejo su hogar en Alejandría y se mudo al Cairo. Ahí consiguió un trabajó como recepcionista en la agencia Orabi, que era la agencia de las estrellas del cine en Egipto, el cual le permitía mantenerse y mantener a su madrasta, la cual la había seguido hasta El Cairo. En esa época, para Nagwa Na´ema Akef, Tahia Carioca y Samia Gamal eran su inspiración, pues representaban la tradición de la danza árabe en medio oriente. Cuando Orabi la vio bailar le dijo que ella debía estar en los escenarios, la convenció para que rentara un traje y le ayudo a conseguir algunas presentaciones en el Sahara City Tent, lugar que era muy frecuentado por turistas. Unos meses después ella ya bailaba en el club nocturno Auberge. Su temprano comienzo en la danza hizo que la arrestaran, ya que ella bailaba profesionalmente a una edad en la que era ilegal hacerlo, pues todavía no cumplía los 16 años. Nagwa cuenta entre risas: “La policía me detuvo hasta que me convenció de cambiar mi edad...”. Cuando quedó libre, Nagwa se presentó en el Casino Abdeen, donde conoció a Ahmad Fouad Hassan, quien era productor de shows. Nagwa y Ahmad se casaron, y él le dio su primera gran oportunidad en el show “Adwa Al Madina (Luces de la Ciudad), donde se habían presentado grandes estrellas. Nagwa se entrenó con varias bailarinas y coreógrafas contemporáneas. Entendió perfectamente todos los estilos, desde el baladi y el baile egipcio clásico, hasta todos los estilos del folclor egipcio, árabe y del norte de África. También estudió Ballet, Jazz, Tap, e incluso llego a introducir en sus actuaciones algo de Flamenco y Tango Argentino. Nagwa alcanzó la cima de su carrera cuando el músico Mohamed Abdel- Wahab compuso una pieza musical entera especialmente para ella, llamada Qamar Arba´tashar (La Luna del día 14). Para Nagwa, esta composición le sirvió de transición de un estilo oriental tradicional, a uno más moderno y coreografeado, donde combinaba el estilo de Tahia Carioca con el estilo acrobático de Na´ema Akef. De hecho, muchas de las piezas de baile mas famosas y bailadas en casi todos los clubes nocturnos árabes y egipcios fueron composiciones hechas para Nagwa Fouad, entre las que se encuentran: Na´asa, Ali Loze, Shik Shak Shok, El Saidi, entre otras. Nagwa formó un grupo de 12 bailarinas y 35 músicos y cantantes, un coreógrafo y un diseñador de vestuario, el cual según sus palabras, era una especie de teatro móvil en pequeña escala, y con el cual viajó por todo el país y se presentó en muchas partes. Para Nagwa, bailar era su prioridad, lo cual detonó el divorcio de Hassan tras seis años de matrimonio. Pero Nagwa no solo hizo carrera en la danza, sino que también incursionó en el mundo del cine, con la película “Sharei el Hob” (La calle del amor) en la que participaban grandes actores, actrices y cantantes. Hasta el día de hoy, Nagwa sigue involucrada en el mundo de la música y la danza, y un ejemplo de ello es su participación en el Festival organizado por Raqia Hassan cada año, llamado Ahlan Wa Salan. Su verdadero nombre era Abla Muhammad Karim, pero en el mundo de la danza y del cine se la conocía como Tahia Carioca, éste último nombre debido a la fusión que hacía entre la danza oriental y los ritmos brasileños. Nació en Ismailia en 1915, con el nombre de donde Abla Muhammad Karim, se crió al lado de su familia. Cuando era una adolescente, se fue a vivir al Cairo,donde estudió en la escuela de danza oriental de la bailarina rusa Ivanova. Tahia se mudó. con una antigua vecina llamada Suad Mahasen, dueña de un club nocturno, y la cual se rehusó a incluir a la joven en ese tipo de vida. Un día conoció Badia Masabni pidió conocer a la joven recién llegada, la contrato para a trabajar en su Casino, bailando en un grupo de danza, y le dio el nombre artístico de Tania Mohamed. En este lugar fue donde conoció a Samia Gamal, con la cual surgió una rivalidad que era bien conocida por todos. Su gran talento hizo que se volviera muy popular, y pronto consiguiera la oportunidad de bailar solos dentro del show. Pronto comenzó a ser nombrada como Tahia Carioca, debido a que, fascinada por la samba, comenzó a incorporar pasos y ritmos de samba en sus bailes. Tahia participó en muchas películas, durante la “Época Dorada” de Egipto. Ella no solo tenía el gran don del baile, sino que también sabía cantar y actuar. Debutó en el cine con la película "Doctor Farahat", en 1935. A partir de ahí protagonizó 120 películas, y numerosas participaciones en televisión y en teatro. Llegó a ser tan famosa, que en los años 40 fue invitada a bailar en la boda del Rey Farouk. En esta ocasión bailo con música cantada por el gran Om Kalthoum, que era gran admirador de Tahia; Om decía que Tahia Carioca era una artista capaz de cantar con su cuerpo. Ella era muy conocida por su estilo particular de baile, en el que incorporaba gestos y coqueteos. Era tal su talento y el éxito que había logrado, que a sus 31 años ya era considerada como una leyenda en el mundo de la danza en Egipto. También realizó giras por países como Francia, España, Italia y Holanda, donde también cosechó grandes éxitos. Tahia Carioca murió el 20 de septiembre de 1999 de un paro cardiaco, a la edad de 84 años. Muchas personalidades de la música y la danza concuerdan en que Tahia refinó la danza egipcia, llevándola a un nivel artístico que nunca se había alcanzado, y que era comparable con las artes admiradas por la clase social más alta. Son cientos de bailarinas las que aprendieron de Tahia en forma directa o indirecta, ya sea por trabajar con ella, o por absorber su deslumbrante estilo artístico. Soheir Saki nació en una pequeña ciudad de Egipto llamada Mansoura, en 1944, donde vivió con su familia hasta los nueve años de edad, para después mudarse a la ciudad de Alejandría. Soheir se enamoró de la música y la danza desde temprana edad. Ella aprendió a bailar sola, escuchando la radio, y el talento natural que poseía para el baile salió a flote. Cuando tenía 11 años, Soheir comenzó a ser invitada a bailar en las bodas y los cumpleaños de familiares y amigos. Después se mudó al Cairo, ciudad considerada como la capital del mundo del entretenimiento en Egipto, donde comenzó a bailar en bodas. Mas tarde comenzó a realizar presentaciones en clubes nocturnos. Sus principales fuentes de inspiración eran Samia Gamal y Tahia Carioca, y tal como ellas, Soheir por su talento nato se convirtió en una leyenda de la danza árabe. Recibió varias medallas del Shah de Irán, el presidente de Túnez y Gamal Abdel Nasser. El ex presidente de Estados Unidos Nixon la llamó Zaghari”, al saber del significado de dicha palabra, que se refería al grito que era emitido como expresión de alegría. Su cantante favorita era Oum Kolthoum, con la cual el presidente de Egipto Mohamed Anwar Al Sadat la comparo; la llamaba "la Oum Kolthoum del baile", y le dijo, “Así como ella canta con su voz, tú lo haces con tu cuerpo.” Soheir fue muy valiente al atreverse a bailar la música de Ol Kalthoum, pues en esa época Soheir era joven y no muy conocida, mientras que Om ya era una de las cantantes más reconocidas dentro del mundo árabe; sin embargo, la misma Om dijo que Soheir interpretaba la música de manera hermosa. Soheir Saki era una bailarina dulce y de estilo muy elegante, conocida por su estilo "suave" de bailar que era único. Ella era similar a Tahia Carioca en sus movimientos de cadera, y siempre tenía una expresión facial de inocencia. Soheir Saki era frecuentemente llamada "Bint e Baladi" lo que significaba "Hija del pueblo" por ser una bailarina natural del baladi. A diferencia de Nagwa Fouad, quien era su gran competencia en ese tiempo, Soheir no apoyaba sus shows en accesorios para atraer a su audiencia. Su estilo era puro y preciso, y no requería de mucho espacio para bailar y lograr conectarse con su público de tal manera que los dejaba sin aliento. Sus presentaciones siempre eran sencillas al igual que su vestuario. Ella siempre actuó como solista, y solo era acompañada por una magnífica orquesta, con la que siempre se conectaba maravillosamente y lograba crear magia en el escenario, y nunca fue acompañada por cantantes, bailarinas o algún grupo de baile. Soheir nunca requirió de un coreógrafo para crear su show, pues bailaba lo que salía de su propia inspiración y sentimiento, ya que al escuchar la música dejaba que ésta la llevara. Soheir siempre ha creído que la danza es un arte que como tal debe ser honrada y respetada, y que no es para lucir el cuerpo y posar en escena. Ella siempre se respetó como bailarina y como mujer, y nunca comprometió su integridad, a pesar de que las tendencias iban cambiando en cuanto a vestuarios mas arriesgados y shows mas variados. El camino para Soheir no fue fácil, pues tuvo que lidiar al principio con la desaprobación de su padre, logró superarla, y paso de ser famosa en los cabarets griegos donde ella bailaba, a ser una estrella de la televisión nacional. Debido a la situación económica provocada por la Guerra del Golfo en 1990 y 1991, los dueños de los clubes nocturnos no pudieron permanecer abiertos por mas tiempo. Soheir decidió retirarse mientras se encontraba en lo mas alto de su carrera, al tiempo que las oportunidades para las bailarinas y la opinión sobre ellas en general iba decayendo. De cualquier forma, hubo la especulación de que Soheir Saki se siguió presentando ocasionalmente en los años 90´s. Oficialmente, Soheir salió de su retiro en Mayo de 2001, para enseñar a cientos de bailarinas alrededor del mundo en el Festival anual organizado por Raqia Hassan en el Cairo, "Ahlan Wa Salan". Desde entonces ella asiste anualmente al festival para impartir seminarios y disfrutar de los shows. Soheir Saki es otra de las bailarinas que ha dejado legado, pero su mas conocida aportación al baile han sido sus movimientos de cadera, entre ellos el más famoso y conocido como dislocación de cadera, descuadre, descaderado, entre otras, y que muchos conocen con su nombre: el movimiento de Soheir Saki. Fifi Abdou es una gran bailarina egipcia que se encuentra alrededor de los 50 años de edad (aunque su fecha de nacimiento no se conoce exactamente), y a la fecha sigue siendo una excelente bailarina y una mujer muy bella. Fifi proviene de una familia muy pobre. Creció en un pueblo a las afueras del Cairo, donde su padre era policía. Su madre se quedaba en casa a cuidar de ella y de sus cinco hermanos, además de otros 6 niños que eran de su padre. Hasta hace poco Fifi era analfabeta, pero aprendió a leer y escribir y a hablar en inglés por su propia cuenta. Cuando Fifi era pequeña, veía las películas de Samia Gamal, Naima Akef y Tahia Carioca, e imitaba cada uno de sus movimientos. La bailarina a la que más admiraba era Naima. A los 12 años se fue de su casa con la hija de una vecina que tenia un grupo de folklor, en el cual estuvo por un rato, y a los 13 años se convirtió en solista. Fifi comenzó bailando en bodas, y por su estilo único llamó mucho la atención de gente muy importante y comenzó a bailar en hoteles de 5 estrellas. Ha llegado a cobrar hasta 5000 dólares por tres cuartos de hora de baile, y ha ganado hasta 400,000 dólares por año. Se dice que tiene más de 5000 trajes, varios Mercedes y dos departamentos en el Nilo. Fifi asegura que nunca una maestra de danza le ha enseñado ningún paso, y que cada movimiento que ella hace viene desde su interior. Pero no solo se ha dedicado a la danza, también ha trabajado en cine y teatro y ha sido aclamada por sus actuaciones. Fifi se ha casado en cinco ocasiones, la primera de ellas fue en un matrimonio arreglado cuando tenía 14 años. Su último matrimonio fue con un empresario palestino con quien se casó en 1985. Tienes 3 hijas, de las cuales la más pequeña es adoptada. Fifi es considerada como una de las “Grandes Tres” junto con Dina y Lucy, y es una de las bailarinas egipcias más famosas de nuestro tiempo. Tiene un estilo único, y no solo baila excelentemente, sino que sabe como entretener a la gente. Tiene una gran presencia escénica e interacción con la audiencia, y es coqueta y juguetona, aunque no goza de una muy buena reputación. Sus movimientos son sencillos e improvisa al cien por ciento, pues según sus palabras, ella no sabe como hacer una coreografía, y para ella se trata más de interpretar la música que de hacer combinaciones de danza perfectas. Al bailar, los accesorios que usa son el velo, el bastón y los crótalos, y es famosa por su Danza con Shisha. Fifi tiene una personalidad imponente, tanto dentro como fuera del escenario, y por su temperamento volátil ha tenido diversos problemas con las autoridades musulmanas y ha pasado el mismo tiempo tanto en los escenarios como en los juzgados. Para poder vivir en El Cairo Fifi es custodiada por seis guardaespaldas, ya que los radicalistas islámicos la persiguen, y ni los ulemas conservadores de Al Azhar, el centro islámico oficial egipcio se sienten complacidos con su arte.